Bicentenario: La fiesta de todos.

Una celebración como jamás había visto, ni siquiera en la consagración de los mundiales de futbol, jamás se había reunido tanta gente festejando la argentinidad, pero sobretodo festejando la esperanza de un futuro mejor.
Una celebración que no tuvo ni siquiera un mínimo sesgo de violencia, ni siquiera casi casos de simple delincuencia.
Realmente el día de hoy era imposible llegar hasta las cercanías de la Avda. Belgrano en coche. Yo que venia del sur tuve que dejar el mío a más de 20 cuadras, de allí y sin temor a equivocarme creo que asistieron mucho más de un millón y medio de personas.
Vuelvo a destacar la convivencia pacífica de gente de distintas ideologías poniendo por encima la argentinidad, pero también hay que hacer notar el clima de respirar un aire de libertad y del sueño que cada día es posible construir una Argentina más grande, solidaria y justa para todos los habitantes.
Como dijo Anita en su blog, Nestor primero, Cristina después con el apoyo indivisible de funcionarios, militancia y el pueblo apoyando empezamos el cambio y ya no hay vuelta atrás