sábado, 29 de mayo de 2010

Se los dije, ya se veía venir la contraofensiva por los actos del bicentenario por el grupo multimediatico



Esta vez le toco a Eduardo Van Deer Kooy, salir al ruedo con el sugestivo título “Un acompañamiento popular muy lejos de las conjeturas políticas “. En él se preocupa de tirar unas suspicaces e intencionadas preguntas como: “Tendrá, al final, el Bicentenario una derivación política?” “Serán capaces Néstor y Cristina o también la oposición, de capitalizar el aluvión participacional de esos días?” “¿Podría aventurarse detrás de esa conducta colectiva algún pronóstico electoral para el próximo año?

Ante de seguir con el mencionado artículo de Van Deer Kooy, me permito hacer una reflexión acerca de esas preguntas:

1) Plantear esa pregunta de si tendrá o no el bicentenario una derivación política es simplemente querer lavar la cabeza a los que ya la tienen bien lavada por el multimedios para el que él trabaja; o le queda interiormente alguna duda que este no sea así? A ver Van deercito no te quedo claro la señal que se dio a América Latina de integración en cuanto a políticas de inclusión de los sectores postergados de la sociedad o de la integración con el grupo de países que mantienen políticas similares en nuestro continente? Si eso no es tener una derivación política me parece que estas bastante desubicado (más bien tendencioso porque aunque no te guste así fue)

2) Plantear la pregunta de si Néstor y Cristina serán capaces de capitalizar el aluvión participacional de esos días, también me parece desacertado ya que todo lo que se ofreció tuvo un tinte no solo cultural sino emparentado con el pensamiento de los mismos en materia social, cultural, de políticas de derechos humanos, de políticas de estado y si el pueblo asistió masivamente quiere decir que se sintió identificado con lo que se le ofreció. Con respecto a la oposición tampoco hay dudas (salvo honrosas excepciones como Sabatella que estuvo acompañando estos festejos) el resto se dedicó a ser indiferente o a criticarlos.

3) Con respecto a la tercer pregunta yo me aventuraría a decir que si se sigue en el mismo rumbo, si se continua profundizando el modelo con el acompañamiento masivo que tuvo esa conducta colectiva el pronóstico electoral queda bastante claro y me aventuraría a decir algo más “cuanto más palos en la rueda le ponga la oposición a la profundización del modelo, ese pronóstico se verá aún más incrementado”.

Si por otro lado piensa que las conjeturas sobre el futuro político de la participación genuina en la celebración de la sociedad sobre el Bicentenario, esas conjeturas solo permearon entre políticos, economistas, empresarios y periodistas es que parece que no concurrió a los festejos, no escucho las opiniones de la gente, o simplemente se encerró en su esquema pensante, muy conveniente a sus intereses.

Continua diciendo: “Con todo, el Bicentenario dejó plasmadas un par de realidades similares a las existentes hasta ahora.
¿Cuáles? Los Kirchner no asoman todavía preocupados por interpretar las señas de importantes núcleos de la comunidad que aspiran a una convivencia menos traumática que la actual . Sí parecen empeñados, en cambio, en afianzar a los sectores populares que les son fieles con un estilo político y un sistema de poder que desconoce concesiones.
Como contrapartida, la oposición estuvo atenta siempre a tratar de sintonizar con las demandas sociales de armonía. Pero de esa buena voluntad no se trasunta todavía ninguna alternativa política que pudiera seducir para las elecciones del año que viene
.”

Eduardo, no será al revés? No será que los Kirchner saben interpretar las señales de los más números sectores de la comunidad que aspiran a que alguien afiance los logros conseguidos y los profundice sabiendo que esto solo se logra otorgando las menores concesiones posibles? No será que por eso mismo la oposición al estar cerca de sintonizar las demandas sociales de un ínfimo sector de armonía se quedaron solo en esa buena voluntad sin trasuntarse esto en ninguna alternativa política?

En otro punto de su artículo Eduardo continúa diciendo: La impresión final que quedó en el Colón fue que Cristina perdió una ocasión inmejorable para darle, al menos, una pincelada de barniz modesto a su habitual personalidad presuntuosa y sectaria. No hubo en el teatro el mínimo atisbo de la posibilidad de algún desaire hacia ella. Podría haber opacado, incluso, al propio Macri que no terminaría nunca de sentirse seguro con el papel que desempeña. Y haber aflojado, de paso, las inminentes tensiones que le aguardan con Mujica.

La verdad Eduardo que se nota que estas escribiendo para esa parte de la sociedad a la que tienen con el cerebro lavado y a la cual no le funciona ninguna neurona, porque esa personalidad presuntuosa y sectaria que le achacas, en este caso sobrado esta que venía precedida de un agravio donde el mismo Macri termino diciendo que si ella iba no le quedaría otra opción que sentarse junto al matrimonio presidencial. Digo yo de donde vino esa actitud presuntuosa y sectaria de la que hablas? De la Presidenta de tú Nación, del jefe de gobierno, o de esos invitados a los que tanto ensalzas y se la pasaron ridiculizando en sus programas, criticándole su forma de vestir, su cuidado físico, su forma de bailar, su personalidad?

Salteo unos cuantos párrafos de tu veneno y voy a otro que llama mucho la atención. Cuando afirmas lo siguiente: “Los últimos actos kirchneristas han costado un dineral: desde aquel del regreso de Kirchner a Río Gallegos hasta los realizados en Córdoba y Paraná.”

Te falto decir los del bicentenario aunque lo das a entender en el párrafo inmediato siguiente. Te falto decir también que es muy fácil usar el dinero de los que pagan sus impuestos para darle circo al pueblo, es más te falto decir que encima les dan empleo, Asignación Universal por Hijo, vivienda. Y contra eso no se puede, al pueblo lo mantenes contento si le das pan y circo, no es cierto Eduardo?

Termina el artículo diciendo: “En dos semanas se larga el mundial de fútbol, donde también depositan esperanzas.
Las fantasías pueden demasiadas veces más que la realidad. Raúl Alfonsín también soñó en 1986 cuando la Argentina obtuvo el campeonato del mundo en México de la mano de Diego Maradona. Un año más tarde perdió las elecciones legislativas, que terminaron por acelerar su salida de poder y sepultaron sus proyectos. Una lección que los Kirchner, embriagados ahora por el acompañamiento social del Bicentenario, no deberían desdeñar
".

Eduardo, te recuerdo que también ganamos un mundial de futbol con la dictadura en el poder y que no subestimes al pueblo, en el mundial de futbol se pone en juego el sentimiento de competencia, de pertenencia a una nación, no el apoyo a un gobierno o a una línea de políticas de gobierno que el mismo lleva a cabo. El mundial de futbol tiene que ver con nuestra pasión, con las raíces que tenemos con un juego colectivo que me parece uno de los más bonitos que hay. Como dije antes no confundas las cosas, ya sea con intencionalidad o sin ella, a lo sumo un mundial despierta nuestro sentimiento de pertenencia a una nación no el apoyo a quienes nos gobiernan.

El que quiera leer la nota de Eduardo Van Deer Kooy puede hacerlo acá.

1 comentario:

Margarita dijo...

Te agradezco la invitacion a la lectura, pero de estos personajes no
me molesto ni en mojarme el dedo para dar vuelta la pagina.
Hiciste muy buenas reflexiones.
Ya las debe haber leido el Periodista
Dependiente.